La ciudad de Ayacucho avanza en una de las obras más importantes para la mejora del servicio eléctrico. Desde hace más de dos años, la empresa PROA lleva adelante la instalación de una nueva subestación transformadora de 132 kW, infraestructura clave que no solo beneficiará a los habitantes locales, sino que también promete abastecer a otras ciudades cercanas.
Este proyecto, de gran envergadura, busca optimizar el suministro de energía en la región, asegurando una distribución más estable y eficiente. La nueva subestación permitirá reducir los cortes de energía y mejorar la capacidad de respuesta ante contingencias en el sistema eléctrico. Además, favorecerá el desarrollo industrial y domiciliario, brindando mejores condiciones para el crecimiento económico y social de Ayacucho y las localidades vecinas.
Sin embargo, la construcción de la línea de conexión entre Ayacucho y la red central de energía enfrentó un obstáculo inesperado: dos vecinos de la zona se oponían a que el tendido eléctrico atravesara sus terrenos. Esta situación generó demoras en la ejecución del proyecto, aunque la empresa continuó avanzando en otros sectores mientras se resolvía la controversia.
Tras semanas de negociaciones entre ambas partes, se logró un acuerdo y la empresa pudo reanudar los trabajos en el tramo afectado. “Mientras se negociaba con los vecinos, la empresa continuaba trabajando en el resto de los tramos, pero la situación generó cierta demora”, explicaron desde la empresa. Finalmente, con el conflicto resuelto, los trabajos pueden continuar sin mayores interrupciones, asegurando que la obra siga avanzando a buen ritmo.
Los responsables del proyecto han destacado el compromiso de todas las partes involucradas para destrabar el conflicto y continuar con una obra que traerá beneficios a miles de personas. La coordinación entre la empresa PROA y las autoridades locales fue fundamental para hallar una solución que respetara los intereses de los vecinos y, al mismo tiempo, garantizara la continuidad del plan energético.
En cuanto a los plazos restantes para la finalización de la obra, se estima que aún quedan al menos seis meses de trabajo, con la posibilidad de que el plazo se extienda levemente según el desarrollo de las tareas finales. Se están llevando a cabo trabajos de ajuste en la infraestructura y en la conexión de los transformadores para asegurar su correcto funcionamiento.
La comunidad de Ayacucho espera con expectativa la culminación de esta obra fundamental, que mejorará la calidad del suministro eléctrico y contribuirá al crecimiento y desarrollo de la región. Se espera que en los próximos meses la subestación esté operativa y pueda empezar a brindar sus beneficios de manera efectiva.
